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divendres, 27 de desembre del 2013

Sobre la mitologia a la cultura contemporània

Si hi ha una cosa que em fascina és la mitologia i la seva iconografia; em fascina veure com el nostre món "modern" està encara impregnat per una simbologia que depèn de mites i llegendes ancestrals

http://mitosgriegosdegraves.blogspot.com.es
/2010/03/levantando-vuelo.html
A la imatge, per exemple, el mite de Perseu: de quan combat el monstre per salvar a Andròmeda. L'heroi, la noia i el monstre: avui, encara celebrem el dia de Sant Jordi, aquell que també va amb el cavall en contra del drac i a salvar la princesa... 

em vaig quedar bocabadada quan vaig llegir el conte malgaix titulat Homandraikisantano, que és el nom del monstre de 7 caps de qui és salvada la princesa per l'heroi. 




divendres, 13 de desembre del 2013

La Odisea de Woody Allen: ensayo sobre cine y literatura

Cuando intenté estudiar en una universidad reglada, me llevé un disgusto tremendo. Tenía un profesor que sabía tantísimo y transmitía sus conocimientos de tal manera que, en sus clases no cabía ni una aguja: decenas de estudiantes se sentaban por el suelo -e incluso en la tarima- para escuchar a Gonzalo Pontón, profesor de Literatura Comparada de la Universidad Autónoma de Barcelona. Había clases que parecían el desierto del Gobi...llanas, inhóspitas...pero las de Gonzalo estaban a reventar...


dimecres, 11 de desembre del 2013

Madagascar 2010: el meu diari de viatge

Al 2010 vaig tenir la sort de poder passejar per l'illa vermella amb el Seb i la seva família durant un mes. Va ser un viatge que no oblidaré mai. Madagascar és una illa gegantina amb una història sorprenent. 

Si et vols apropar a la història malgaix i a la seva cultura i costums, aquí deixo el tastet de la meva experiència. 



Madagascar és un lloc fascinant: no hi ha grans animals com lleons o elefants, però n'hi ha d'altres que no existeixen enlloc més del món: com els lèmurs i centenars d'altres bitxets com l'escarbat jirafa o el camaleó fulla, que podreu conèixer a través del viatge que us proposo. 

Parlo una mica de tot: primer, situar l'illa geogràficament, parlar de la seva història, bandera i costums: dels orígens i del destí de la seva població. També degustar plats i tradicions; una mica de flora, una mica de fauna...

Vaig tenir la sort que el tiet del Seb és guia turístic i vaig intentar retenir tot el que em deia...Com tinc mala memòria, vaig preferir posar-ho per escrit...

Espero que el disfruteu tant com jo...Va ser tota una experiència...

dimarts, 10 de desembre del 2013

De cuando Dios da pan a quien no tiene dientes...


Yo quería regalarles a mis compañeros de trabajo el libro que les había escrito y miré autoediciones, pero no tenía suficiente dinero... Como trabajaba en el bus turístico y Turismo de Barcelona -en su "cena" de Navidad- suele dar un obsequio cada año a los trabajadores, pensé que sería más noble regalar un libro escrito por un trabajador a sus compañeros que no una vil bufanda del Barça, que es lo un año dieron como regalo de Navidad...Que no estoy en contra ni del fútbol ni de las bufandas pero me pareció que el libro tenía un valor añadido que les importaría fomentar...

A pesar de la tónica de la que la empresa hace gala, decidí contactar a la directora de Productos Turísticos y el bus turístico es su producto estrella de la marca Barcelona. Le mandé un email directamente a ella porqué, dos o tres años atrás, cuando trabajé en la recepción de Turismo de Barcelona, supe de la existencia de un comité de ideas. Después de preguntar si yo podía participar y decirme que sí, mandé unas cuantas ideas al comité. 

Nunca me contestó nadie...Eso fue en primavera y, en la cena de Navidad de ese año, les dije que no me importaba si no les gustaban mis ideas pero que les hubiera apreciado la cortesía de contestar...

La primavera siguiente, un año después de mis propuestas, el comité de ideas me respondía con un año de retraso diciendo algo así como que mis ideas no estaban mal pero que eso esa cosa del Ayuntamiento...Propuse un carnet ciudadano participativo para ahorrar en museos que se llamaba B-52 y una ruta de Sant Jordi por Barcelona que resucitaba a los Sant Jordi de las fachadas y arte público de la ciudad tanto para adultos como para niños. 


Como quería, pues, regalarles el libro a mis compañeros de trabajo y el comité de ideas había pasado de mí anteriormente, me atreví directamente con la directora de Productos Turísticos, la señora Mònica Terol de Turismo de Barcelona. Le mandé un email a finales del 2012 por si quería regalar el libro a los trabajadores: me daba largas y solo me pedía cuánto costaba el libro. Yo le decía que no podía saberlo sino sabía los ejemplares que estaban dispuestos a regalar. 

Un detalle importante del asunto es que yo estaba contratada por Magmacultura, empresa subcontratada por Turismo de Barcelona y, de Magma cobran los infos; pero los conductores pertenecen a TMB (Transports Metropolitans de Barcelona) aunque sean las personas con las que, en realidad, yo compartía mi jornada...Si Turismo lo regalaba a los trabajadores, lo recibirían los informadores pero no los conductores. Si entre Turismo y TMB lo regalaban, quizás llegara a unas 500 personas; si solo lo regalaba Turismo, llegaría a unas 200-250, pero no a los conductores...

Cualquier editor sabe que, dependiendo de la cantidad de libros que quieras imprimir, variará el presupuesto: a más libros, más barato. La señora Terol me pedía, pues, algo que yo no podía saber si ella no me indicaba a cuántas personas, más o menos, se les podría ofrecer. Total, que viendo que entrábamos en un bucle, pensé en presentarlo a varias editoriales y, como estaba segura que lo querrían, simplemente, debía acertar a llamar a la puerta correcta. Conseguiría un editor para "tener más credibilidad" en el seno de una empresa de corte tradicional y nada acostumbrada a las políticas del RSC. 

Y quien busca, encuentra...Sobre autores y editores

dilluns, 9 de desembre del 2013

(D) Sobre autores y editores

La noche del 5 de enero de 2013 mandaba parte del manuscrito de mi libro de iconografía sobre los monumentos de Barcelona a 11 editoriales catalanas... y esa semana mismo llegaron los reyes magos de oriente para cumplir mi sueño...

En total, 5 editoriales me respondían sorprendentemente casi de inmediato: con algunas hablé por teléfono, con 2 hice una entrevista y finalmente, escogí la que me pareció más afín que, a su vez, me ofrecía mejores condiciones: 1000 euros de avanzadilla por el trabajo ya hecho que yo esperaba invertir en reemplazar mi prehistórico ordenador...

Y empiezo a pensar dos cosas: o me equivoqué de editor o mi libro está maldito...

Cuando entré por la puerta del despacho, aún en pie, lo primero que se me preguntó fue a quién iba dirigido al libro. "A los amantes de Barcelona", respondí.

Caí bien y me hicieron tomar asiento.


Después de charlar un ratito, me pusieron tres o cuatro libros delante y me pidieron que seleccionara el que yo veía más afín...Me sentía como Indiana Jones escogiendo grial...Elegí uno modesto, más bien de bolsillo...quería algo manejable y accesible...Pero creo que ellos ya tenían en mente hacer algo más grande...y más caro, claro...

Le dije que trabajaba en el bus turístico y que había contactado a la directora de Productos Turísticos de Turismo de Barcelona. Y que le había propuesto ofrecer el libro como regalo de Navidad para los trabajadores del busEl editor, por su parte, contactó al jefe de publicaciones del Ayuntamiento, con quien ha colaborado en algunas co-ediciones y me comentó que el Ayuntamiento había dicho, literalmente, que si su hermano jugaba, él jugaba también. Y literalmente es así: el jefe de publicaciones del Ayuntamiento es el hermano del tesorero de Turismo...Todo queda en familia...

Si colaboraba Turismo, el Ayuntamiento también lo haría; sino, no. Después de tres meses de insistencia, la directora de Productos Turísticos accedió a recibirnos para que le explicáramos, básicamente, cuánto costaba el libro. Lo demás, era pura utopía...

El título y la portada

En cuanto tuvo la ocasión, el editor me fulminó la portada y el título. Yo lo quiero titular Barcelona: Bellesa i Oblit (Barcelona: Belleza y Olvido) porqué no puede tener otro título pero el editor dijo que no era comercial y apostó por “La Barcelona monumental”. 

Me horroricé tanto que busqué desesperadamente otro título. 

Como esperábamos la colaboración de Turismo y el Ayuntamiento, pensé en una viñeta antigua que fidelizaba más con los eslóganes del Ayuntamiento y propuse: “Barcelona És-Cultura”. Coló y pude desterrar a “La Barcelona Monumental”… pero cada vez que salgo con “Bellesa i Oblit” el editor cambia de tema…

Tampoco la portada no le parecía bien, decía que no se reconocía el monumento que proponía y que tampoco era un monumento muy conocido. No dudo de la experiencia del editor: el sabe más que yo qué es lo que más vende, lo que puede tener un envoltorio más atractivo...pero yo no busqué la portada, ella me encontró a mí y me pedía justicia a gritos...Es una imagen tan bella como olvidada, desgarradora e irreconocible...como la ciudad misma...Pero mi portada no le gustó al editor por irreconocible...Qué paradojas...Creo que mi editor no entiende la naturaleza del libro...y si cambia el título y la portada, el libro quedará desmembrado y no sé si lo voy a reconocer o será como un hijo bastardo. 

La foto que querría de portada es la que, a lo lejos, parece "un genocidio monumental". Es de Pepe Encinas y pertenece al montaje del monumento del doctor Robert, en la plaza de Tetuán, a principios de los ochenta, cuando fue descubierto y se volvió a poner en la vía pública. Y esa foto, aunque no lo parezca "a priori", es una metáfora de cuando, en Barcelona,  triunfó la belleza sobre el olvido



Considerado como el único alcalde honesto que ha tenido la ciudad de Barcelona, Bartomeu Robert se rebeló contra el Estado y dimitió para no tener que aplicar a los ciudadanos unos impuestos injustos que pretendían sufragar algunas de las pérdidas económicas fruto de la caída de los territorios de ultramar: Cuba, Puerto Rico, Filipinas y Guam. Cuando murió el doctor Robert, los ciudadanos le erigieron un monumento por suscripción popular. El monumento fue puesto en la plaza Universidad. 



Después de la Guerra Civil, por "catalanista" fue desmontado y desapareció del mapa. Como se fundían los monumentos para fabricar artillería, se pensó que había sido fundido. De hecho, la bandera y uno de los personajes fueron fundidos pero el resto del gigantesco monumento, se esfumó sin dejar rastro. 

A principios de los ochenta, unos obreros llamaron al Ayuntamiento. Estaban excavando para construir un edificio y encontraron enterradas unas estatuas: lo leí en el libro de Monumentos de Barcelona, pero me encantó poder conocer al fotógrafo que vivió y capturó esos momentos mágicos, Pepe Encinas. Me contó que se sentían como Howard Carter descubriendo la tumba de Tutankamon...Resultó que, en el año 40, cuando el régimen franquista lo hizo desmontar, algun funcionario del Ayuntamiento dio orden de esconderlo para que no fuera destruido...

Poco después de encontrarlo era vuelvo a montar, pero como en Universitat habían hecho las obras del metro, pensaron que era demasiado peso y lo pusieron en Tetuán. 

El precio de la ilusión...

Después de tres meses de insistencia, la directora de productos turísticos de Turismo de Barcelona, nos recibió sin mucha ilusión y la entrevista fue un desastre. Turismo no iba a regalar el libro para Navidad y, de rebote, el Ayuntamiento tampoco quiso colaborar. 

El problema principal que tiene el libro es que el editor quiere hacer un libro carísimo, precioso, con fotos en color a mansalva, delicioso, exquisito...en su línea...

No es que no me parezca bien, al contrario, me enorgullece...pero soy escritora novel y creo que no hace falta tanto...Yo llegué con una idea de libro sencillo, manejable, algo pequeñito pero consistente. Más bien creo que tiene perfil de libro "de fondo", de esos que no son un super ventas pero resisten mejor el paso del tiempo... Como la ciencia ficción conceptual: que no tiene tanta pirotecnia y suele envejecer mejor...

El libro salía muy caro y ni el Ayuntamiento ni Turismo querían colaborar, así que al editor se le ocurrió hacer un crowdfounding...

Para hacerlo necesitaba algo con lo que compensar a los posibles mecenas, así que intenté que el editor me detallara qué se podía ofrecer. Por mi parte, busqué patrocinadores: llamé a las puertas de El Corte Inglés pero allí no contestó nadie. Pensé que sería un detalle si ofrecían una copita de cava en su restaurante. Así los lectores podían leer el capítulo de la plaza de Catalunya con perspectiva...desde lo más alto...y de paso, vete tú a saber, quizás esa persona compraba algo en sus almacenes...o se tomaba un bocadillo o una tapichuela aprovechando la lectura... Pero nada, ni rastro. El editor dijo que les contactaría pero no creo que lo haya hecho....


Por otro lado, tuve una agradable sorpresa: desde los pabellones Güell, me contestaban que sí, que podían hacer un descuento en el precio de la entrada del monumento. Me emocioné mucho porqué es uno de mis favoritos, es el Jardín de las Hespérides que Gaudí construyó en Barcelona, su primera obra arquitectónica, que olvidada en los límites de la ciudad, depara un sinfín de sorpresas. Le dije al Sr. Bosch de Patrimonio, que es con quien hablé, que el editor se pondría en contacto con él...pero creo que tampoco lo hizo...Con lo poco que tenía, intenté un crowdfounding y me puse a rellenar formularios, lo mandé y me contestaron que no lo veían apropiado...

Un amigo me dijo que era normal: si ya hay editor...¿por qué un crowdfounding? Eso fue a principios de verano...aunque insistí llamando y mandando emails, el editor tenía mucho trabajo y ni siquiera me devolvía las llamadas y los emails...El 20 de noviembre quedábamos de nuevo y me dijo que no entendía por qué el Ayuntamiento no quería colaborar, ni Turismo, que era un proyecto redondo...

Le pregunté si realmente quería publicar este libro y me dijo que sí, que sí, que hacía tiempo que no veía algo tan bien documentado...pero que no tenía dinero y que teníamos que hacer un crowdfounding...Le dije que ya lo había hecho en julio, tal y como me pidió y que me lo habían denegado; que se lo había mandado todo por email. Pero creo que no los leyó y por eso ya ni se acordaba...Dijo que se tenía que probar otra vez...Insistí en el hecho de hacer un libro más modesto, dijo que pediría otro presupuesto. Le pregunté qué pasaría si el crowdfounding no iba bien...si lo publicaría igual. Me dijo que depende de lo que costara la edición "modesta": si ronda los 6000 euros, habrá libro...sino, no. 

Así que mis ilusiones parece ser que cuestan unos 6000 euros... 

En la viñeta vemos al doctor Robert y a su paciente: Barcelona. Pertenece a la revista satírica L'Esquella de la Torratxa y es de 1899. La viñeta se titula: "La primera visita al médico" y el doctor Robert visita a la enferma que le pregunta: "¿Qué le parezco que tengo? y el doctor contesta: "Una desadministracionitis aguda de la que no sé si nos vamos a librar". ¡Que no falte el humor!

Pero bueno, como no hay mal que por bien no venga y como a todo le saco yo brillo porqué la necesidad agudiza el ingenio, si Turismo no juega ni el Ayuntamiento tampoco, me dirigiré directamente a los amantes de Barcelona, a quien he dedicado un juego aprovechando el contenido del capítulo que dedico a uno de los espacios de la ciudad que más se admira y menos se mira: la plaza más fastuosa de Barcelona...

El capítulo se llama plaza de Cataluña: la historia de una agonía. 
¿Quieres jugar?  

diumenge, 8 de desembre del 2013

(C) Sobre la utopía y la ignorancia

Desde que leí a Baudolino, cada vez que alguien me llama utópica, pienso en lo tercas y ciegas que me resultan algunas personas...Esas a quien quiero lejos porqué todo se pega menos la hermosura...Como no hay peor ciego que el que no quiere ver, l@s que ajusten las velas, sean bienvenid@s a bordo.

Soy la personificación viviente y parlante de la erótica del fracaso, vivo en la ciudad más paradójica del mundo y escribo para reírme de mi propia desgracia porque, como dijo Oscar Wilde: "La vida es algo demasiado importante como para hablar con seriedad de ella". 

No sé mucho de reencarnaciones pero a veces siento que pudiera ser Casandra: parezco condenada a navegar en un mar de paradojas y tormentos, a caballo entre la pasión y el desencanto, entre la belleza y el olvido, entre la utopía y la ignorancia

Cuando llevaba dos años trabajando en el Barcelona Bus Turístic me di cuenta de que, cuánto más vemos algo, más invisible lo hacemos. Nuestro cerebro no necesita información repetitiva: si ves un monumento 3 veces al día acabas por no mirarlo más porqué tu cerebro ya sabe que está allí y no necesita hacer hincapié en ello...Y así, borramos de nuestras mentes el arte público de la ciudad. Paradójicamente, cuánto más vemos algo, más invisible lo hacemos porqué deja de ser una información relevante para la supervivencia del individuo y conforma un elemento espacial inamovible en el que no nos fijamos porqué no somos realmente conscientes de su dimensión más allá del embelesamiento de su envoltorio



Así pues, comprobé lo poco que sabíamos del arte público los trabajadores del bus turístico y me puse manos a la obra: les iba a escribir un libro a mis compañeros de trabajo para hacerles su día a día más amenoYo quería regalarles a mis compañeros de trabajo el libro que les había escrito y miré autoediciones, pero no tenía suficiente dinero...así que decidí contactar a la directora de Productos Turísticos de Turismo de Barcelona y, tres meses después, accedió a recibirme a mí y a mi editor, que conseguí uno...

Le pregunté si tenían regalo para Navidad 2013 (era marzo) y me dijo que no. Le propuse el libro como regalo de Navidad...Así, yo ponía el contenido y no tenía que poner el dinero, ellos pagaban parte de la edición comprando algunos ejemplares y se los regalaban a los trabajadores para Navidad. Y así, de alguna manera, conseguía mi plan: regalarles el libro a mis compañeros sin tener el dinero para ello. 

El editor tenía los números, yo la pasión: el plan era noble y tenía que ser infalible. Había pasado tejiendo un clip de 1 minuto durante las últimas 60 horas. Una de las noches la pasé en vela: mi ordenador era viejito y no soportaba el software de edición, así que perdí el montaje dos o tres veces...Tardé unas 60 horas para tejer poco más de un minuto que no sirvió de nada, solo para insultar, sin querer, a la directiva en cuestión. 


Una vez reunidos los tres en una pequeña sala, pedí un reproductor para introducir mi discurso con el clip que había confeccionado. Como quería ser un poco comercial porqué Turismo es una empresa de corte tradicional, puse el clásico de Mansell de fondo...Sé que está ya muy desgastado pero era para hacerlo todo un poco "más familiar"... 

Total, que puse el clip, donde salen 12 monumentos emblemáticos tan bellos como quizás olvidados...Desde luego, por la directora en cuestión: le pregunté cuántos había reconocido y me respondió: "Ninguno". Sin duda, debió ser falta de voluntad...algunos de ellos están en la plaza de España y la de Cataluña...

Fuera lo que fuese, cuando me dijo que no había reconocido ninguno, me rompió todos los esquemas...Y aferrándome al discurso socrático, solo se me ocurrió decir: "Bueno...pues está bien empezar por reconocer la propia ignorancia...".



No era mi intención pero quedé aún peor, lo vi en su expresión. Pero yo apelaba a Sócrates...¿por qué de Sócrates ya casi no se acuerda nadie? Es un problema...Luego la gente no me entiende cuando hablo de la ignorancia como virtud del conocimiento...Así que intenté salvar lo que pareció -sin querer- un insulto, diciendo de nuevo muy socráticamente: "Porqué todos somos ignorantes pero ignoramos cosas diferentes". Creo que no le caí bien pero, luego, creo que le caí peor... 

Pregunté si se hacía algo para el 130 aniversario de Colón. Me dijo que no sabía que era su aniversario y que el Ayuntamiento no tenía nada previsto. Pensé que era una lástima no hacer nada...pero algo hicieron este año en el monumento...Taparon las esculturas con publicidad y pusieron una camiseta al navegante, que allí hondeaba desconcertado, como perdiendo el rumbo...

Pero empecé mi discurso ilustrando la belleza y el olvido en las esculturas del clip de presentación. Le hablé de la profunda belleza del arte público y de cómo los visitantes sienten por él pasión y los ciudadanos, desencanto. Y de como veía en los monumentos un eje de cohesión entre estas dos realidades dispares...Y, al final, solté las tres letras mágicas y me creí Alí Babá abriendo cuevas porque realmente pensaba que esa sería la guinda de mi pastel...
Y pronuncié: RSC...

Después de un incómodo silencio y una sospechosísima apertura ocular que denotaba cierto desconcierto, comprobé, atónita, que la directora de Productos Turísticos de Turismo de Barcelona, no tenía ni idea de lo que le estaba hablando...

Le dije que eran las siglas de Responsabilidad Social Corporativa y le expliqué llanamente que la RSC apela a romper con el modelo tradicional de empresa y promueve una Empresa 2.0 que fomenta la participación, la cooperación, la transparencia, el mecenaje y la filantropía. Después de insistir en el tema de la cooperación, el mecenaje, el valor añadido del "producto" y la reputación de la empresa, la señora directiva me dijo que todo eso era muy bonito pero que era una utópica. Y me quedé sin guinda y sin pastel...

dissabte, 7 de desembre del 2013

(B) Sobre la Belleza y el Olvido

Cuando llevaba dos años trabajando en el Barcelona Bus Turístic me di cuenta de que, cuánto más vemos algo, más invisible lo hacemos. Nuestro cerebro no necesita información repetitiva: si ves un monumento 3 veces al día acabas por no fijarte más porqué tu cerebro ya sabe que está allí y no necesita hacer hincapié en ello...Y así, como una papelera o la placa con el nombre de una calle, borramos de nuestras mentes el arte público de nuestra ciudad

Y esto simplemente sucede porqué un elemento espacial inamovible como es un monumento, no es una información relevante para la supervivencia del individuo. Pero algunos, escapando del hechizo del cerebro reptiliano, toman consciencia de las cosas -sean papeleras o monumentos- y ven más allá del embelesamiento primigenio de su bonito envoltorio...

Yo he sido víctima de esta irritante y curiosa paradoja: trabajaba en el bus turístico y me di cuenta que los monumentos de Barcelona, allí cubiertos de polvo de olvido y heces, imploraban ser escuchados. Me acerqué a ellos cautelosa y escuché que murmuraban quejumbrosos. 

Pero puedo decir que cuentan historias asombrosas porqué, sin querer, con los años, había aprendido el mismo lenguaje con el que fueron creados: la iconografía, el lenguaje de todo lo imaginable, un lenguaje que hace al arte inteligible. Hay cosas que, a veces, no parece que estén relacionadas pero lo están: simplemente hay lenguajes que se dominan con el paso del tiempo, hablándolos, pensándolos y compartiéndolos. Y el lenguaje del arte es el lenguaje del paso del tiempo...

Esta fuente que aquí veis todavía está por la ciudad...No dibujo muy bien así que quizás no le hago justicia...Era tan grande y protectora que impidió a los soldados instalar toda la artillería a descargar sobre la Vila de Gràcia: algunos no tenían dinero para salvarse de ir a combatir por una guerra que no era suya...y, como es habitual en la historia de la ciudad, los de gracia se rebelaron, sucumbieron y la fuente fue puesta en un lugar donde no molestara...


Si por algo son peligrosos los artistas es porqué hablan un lenguaje que tiene propia dimensión y a veces, a priori, es ininteligible: la ironía y la sátira, por ejemplo, colaboran con el arte y juntos han cruzado numerosos umbrales de censura. Y una vez traspasados, las obras llegan a la gloria, al no-olvido que es la memoria, una especie de felicidad de ultratumba...del más allá...por lo que la memoria sería más importante aún que la felicidad...


Las cosas, en general, están en un lugar por algún motivo y suelen ejercer las funciones que le son propias: según qué representaciones precisan de una lectura más profunda, más analítica por descomposición de sus partes; el conocimiento de cierta información y un esfuerzo mayor de pensamiento crítico para ser bien comprendidas: como las mieles de la ironía. Yo encuentro exquisita la ironía porqué difiere y matiza la literalidad y es un diálogo intelectual deliciosamente recompensante. Adoro las ironías y de las últimas que he leído, algunas de @acaradeperro son muy graciosas. Mofándose de la fastuosa boda india en Barcelona, soltaba por ejemplo: 



Después de dos años y unas 1400 vueltas por la ciudad, me di cuenta que no era la única que había invisibilizado el arte público de la ciudad. Con lo cual, me percaté de lo poco sabía de los monumentos de BarcelonaMis compañeros del turístico sabían tan poco como yo. Para comprobarlo, les hice un experimento en forma de juego para profundizar en la magia de la inercia.

Viendo pues que nadie veía nada, empecé a rastrear libros polvorientos y contaba las anécdotas sobre los monumentos a mis compañeros. Pero al final, como me gusta mucho escribir y siempre voy haciendo resúmenes de lo que leo porqué no me puedo acordar de todo, decidí escribir lo que iba aprendiendo y los apuntes, acabaron siendo un libro de 160 páginas y estructurado en tres partes: 

1. Una panorámica de la historia del arte urbano de la ciudad.
2. Un paseo iconográfico narrado cronológicamente que se extiende desde la era íbero-romana hasta la Exposición Internacional de 1929.
3. Una degustación final que completa el anterior recorrido pero se dispone siguiendo las dos principales rutas del bus (para amenizar la jornada a los compis). Allí encontraremos perlas del porciolismo y de la ferviente modernidad de la Barcelona de la "transición". 

El libro nació de un mar de paradojas y, como la vida misma, ha sido tejido con hilos de belleza y olvido... Como se lo quería regalar a mis compañeros pero no tenía el dinero, lo propuse a la dirección de Turismo de Barcelona como regalo de Navidad para los trabajadores de turístico. Después de tres meses persiguiéndoles y encontrar editor, conseguí una entrevista que no olvidaré jamás


divendres, 6 de desembre del 2013

(A) Sobre la erótica del fracaso

¿Por qué escribí un libro? ¿Por qué quiero que se llame Barcelona: Bellesa i Oblit? ¿Por qué me digo que soy la personificación de la erótica del fracaso? 

Los detalles en la entrevista que, por carambola, me hicieron en El Periódico...

Debo insistir en el hecho que me desgarra profundamente el alma ver mi hermoso chal rojo-pasión photoshópicamente teñido de un violeta feminista que no me hace justicia ninguna...

Pero bueno, la entrevista creo que ha quedado muy amena...Aprovecho para darle las gracias a Gemma, que pudo comprobar que más que una contra, necesito el periódico entero...


Sobre la magia de la inercia

Estamos hechizados por la incercia y el peor de los castigos es el olvido, a quien tememos más que a la muerte. Con el tiempo, elementos que vemos a diario, acaban volviéndose invisibles y los matamos y olvidamos, aunque no sé muy bien en qué orden. 

Simplemente es una percepción: un monumento sigue ahí aunque no lo miremos...¿o no? Si no lo miramos, para nosotros deja de existir, pero quizás alguien, con suerte lo mira y escucha, quizás alguien lo entienda cuando murmure...pero la mayoría admira más de lo que mira y no solo no escucha al monumento, ni siquiera le oye murmurar su propia historia. 

Eso sí, nos echamos una foto que acabamos arrinconando en alguna carpeta, convirtiéndola en una simple muleta de memoria...Y así vamos por el mundo acumulando cosas y, en esa ansia de acumular, hemos perdido la perspectiva crítica de las cosas, sea lo que fuere: monumentos, política o humanidad. 

Cuando trabajaba en el turístico me di cuenta de que pasaba unas 700 veces al año por los monumentos de Barcelona y que poco sabía de ellos